Hace unas semanas destacábamos la labor misionera del Comendador de los Caballeros de Devoción, y Vicario en Colombia de la Iglesia Ortodoxa del Rito Sirio-Bizantino.
http://www.ordenbonaria.com/index.php option=com_content&view=article&id=2215:comendador-de-los-caballeros-de-devocion-de-la-orden-bonaria-&catid=25:orden-bonaria&Itemid=198
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El Padre Andrés Tirado, se esforzó muchísimo en crear allí una misión de fieles, un hogar para la meditación en Cristo.
Los poderes fácticos del Opus Dei, en Colombia hunden sus raíces en la Política, no hay que olvidar que la prestigiosa Universidad de la Sabana, pertenece a esta Orden ultracatólica.
La prestigiosa revista "Harper's" describe al Opus Den en este país como "empresa autoritaria y semi-clandestina que se las arregla para colar tecnócratas adoctrinados, administradores y políticos en los niveles más altos del Estado", aunque también esto lo hace en todos los países, y mucho más en España donde está asentada desde su creación.
El Padre Andrés Tirado, trabaja en los barrios más olvidados, y no se conoce, en cambio, que el Opus desarrolle alguna obra de bien entre sectores necesitados o se ocupe de las vicisitudes de barrios carenciados, inundados o que sean castigados por tantas otras plagas que acompañan en el mundo a la tan dispar distribución de la riqueza.
Lo cierto es que el Opus Dei ejerce, según los testimonios de quienes se alejaron de él, todo tipo de censura, coerción y posible lavado de cerebro sobre sus miembros numerarios y los que ávidamente capta día tras día. Debido a su gran sigilo y a su poder tan sospechoso, el Opus es acusado frecuentemente de ser una vasta operación conspiratoria católica en busca de dominio mundial. Como las listas de sus miembros se mantienen bajo llave, sus críticos suelen llamarlo "la mafia santa", en tanto otros lo sindican como "secta cristiana", y en realidad así parece comportarse y actuar, como una secta.
Al mismo tiempo, el teólogo español Juan José Tamayo Acosta, un estudioso de los trasfondos de la organización, afirma que "hablar en público o escribir sobre el Opus Dei se ha convertido en algo política y religiosamente incorrecto", y eso nos pasa a la Orden Bonaria, que ha sufrido, y seguimos sufriendo estas persecuciones, que la historia, y el tiempo nos garantiza y da la razón.
En la Misión Norte de Bogotá, hoy totalmente desaparecida, por las presiones del párroco romano, ¡¡¡ cómo me recuerda lo sucedido en Huete!!!, en lo que se vivieron las mismas circunstancias, que las de ahora suceden en Colombia, ¿casualidad o modus operandi?.
El párroco, bajo las órdenes de un Obispo del Opus, empezó a arengar desde el púlpito; “Satanás ha venido al pueblo en forma de un falso cura, que va a llevar todas las almas al Infierno, y busca la división de la Santa Madre Iglesia”. Me pregunto yo, quién de los dos curas será el verdadero Sanatás,.
Sin estar contento, y haciendo verdadera labor misionera, según se ve ahora entienden ciertos grupos del catolicismo romano, fue a todas las asociaciones con las que compartíamos convenios, las cuáles prestaban sus locales para la Sagrada Liturgía, en dónde se hacían labores misioneras, para que no permitieran entrar al Padre Tirado.
Nuestro Comendador, siguió pidiendo permiso a uno de los fieles, para celebrar los sábados en su Casa, pero tal fue el miedo y las amenazas del Perro-co católico, que nadie se atrevió a ir, por miedo…
Nuestro Arzobispo Primado, Mar Valentino IV, tomó medidas en el asunto, y llamó personalmente al Obispo Auxiliar de Bogotá, Monseñor José Roberto Ospina; quién negó tener conocimiento de lo sucedido.
¿En qué época vivimos?, ¿ y la libertad de culto?.
Nuestra Iglesia, no necesita pedir perdón por los crímenes, en primer lugar, porque no ha cometido ninguno.
La Iglesia Católica, Apostólica, Romana, ha pedido, por boca de su supremo Pontífice, perdón por los innumerables crímenes cometidos a lo largo de la historia, desde que Constantino le entregó el poder.
Pidieron perdón por la sangre derramada, pero no por el motivo que hizo derramar la sangre, con lo cual se han reservado el derecho de volver a derramarla; la Iglesia Católica Apostólica Romana no ha pedido perdón por la mentira.
¿Cuál es esa mentira, que le ha otorgado el derecho de imponer sus criterios, vejar, torturar y matar a miles y miles de seres humanos? ¿Cuál es esa mentira que le ha otorgado el derecho de obligar a personas doctas, honestas e inteligentes a abjurar de sus ideas? ¿Cuál es esa mentira que detuvo el avance de la ciencia durante mil años y costó la vida a millones de personas que no podían ser curadas de enfermedades que fácilmente podían ser erradicadas con la simple aplicación de principios elementales de higiene?
La Iglesia Católica Apostólica Romana se declaró “divina” e interprete de la palabra de dios, y por consiguiente infalible. Y en base a esa mentira realizó todo lo que hizo a lo largo de los siglos. O Dios no es sabio, algo que como creyente pongo en duda, o la infabilidad del Papa, es la misma que la mía, que la suya, o que la de cualquier otro ser humano.
La Iglesia Católica Apostólica Romana no es más “divina” que la de Osiris, Zeus, Shiva o cualquier otro dios.
¿A que viene entonces el hipócrita pedido de perdón por crímenes cometidos como resultado de su propia esencia y como estrategia de supervivencia y crecimiento? Probablemente a la certeza de que los seres humanos pasan por una etapa de conocimientos que hacen imposible la convivencia entre la falsedad y la ciencia.
Pero se han reservado todavía la base de la que han partido: No han abjurado de la mentira ni pedido perdón por ella. Consecuentemente, y cuando sea oportuno, con la misma base de milenios atrás, podrá volver a oprimir, torturar y matar para imponer su mentira.
La humanidad ha sufrido demasiado a causa de ciertos sectores del catolicismo romano; posiblemente mucha gente crea que el pedido de perdón por los crímenes del pasado cierran el capítulo sangriento definitivamente. Y no se dan cuenta que lo que hizo posible abrir ese capítulo está todavía allí, incólume. La Iglesia Católica Apostólica Romana, no ha pedido perdón por la mentira.
Las mentiras, las cifras de sus asesinatos, sin contar los que han muerto, cuando bendecían los regímenes políticos contrarios a sus pensamientos.
1 Disputas por la silla papal en el año 251 por los sacerdotes Novaciano, Cornelio, Cipriano y Novat. 200
2 Venganzas y disputas entre cristianos en el año 315. 200
3 Cisma de los Donatistas en Africa 400
4 Guerras civiles en el Imperio Romano por 400 años causadas por el término "consubstancial" 300,000
5 La querella de los iconoclastas e iconoclastas. 60,000
6 Cruzada contra los Maniqueos en el ano 845 por la emperatriz Teodora. 120,000
7 Sediciones provocadas por los sacerdotes que aspiraban a sillas episcopales. 20,000
8 Las Cruzadas 1,200,000
9 La Cruzada que devastó las costas del Báltico. 100,000
10 Cruzada contra el Languedoc frances. 100,000
11 Cruzada contra los emperadores, ideada por Gregorio VII 50,000
12 Cisma de Occidente en el siglo XIV 50,000
13 Guerra contra Juan Huss y Jeronimo de Praga para dar fin al cisma de occidente 150,000
14 Matanzas de Merindol y Cabrieres, que incluyen torturas y violaciones a mujeres y niños. 18,000
15 Inquisición en Europa 300,000
16 Conquista, Inquisición y dominio en América durante tres siglos 12,000,000
17 Evangelización del Japón por los R.R.P.P. Jesuitas. 300,000
TOTAL 14,768,800
La cifra en esta Web es de cada número de sufrimiento y de sus familias, es un HOLOCAUSTO VATICANO, si en el HOLOCAUSTO JUDIO, se dan cifras muy a la ligera, de 6,6 Millones. El HOLOCAUSTO VATICANO, lo supera en más del doble. Por esta razón a estos extremistas de Roma (no a todos), que insultan a las demás Iglesias, yo les invitaría a lavarse las manos teñidas de sangre.