Sunday, August 22, 2010

Medalla de Genghis Khan.-

Entre los días 11 y 13 de julio, se celebró el acontecimiento más importante del año para los mongoles, el Festival Naadam. Se trata de una competición deportiva cuyos orígenes se remontan a la época de Genghis Khan, cuando se usaba para evaluar la destreza de los soldados, y que es presidida por Su descendiente el Príncipe Perev Davanyam, Gran Collar de la Orden Bonaria.

Actualmente hay tres competiciones: tiro con arco, lucha y carreras de caballo. Todas las categorías son mixtas menos la lucha, donde las mujeres tienen vetada su participación. Las autoridades comunistas, que tomaron el poder en 1924, preocupadas por cualquier tipo de reunión pública, decidieron centralizar el Naadam en UB y prohibirlo en el resto del país.

Un grupo muy especial de guerreros mantiene la tradición Caballeresca del Gran Khan, en la Sagrada Orden Filosófica y Dinástica de Ghengis Khan, formada por guerreros mongoles y Chamanes azules, los más poderosos de Mongolia.

También en las zonas rurales los festivales son más reducidos, se concentran en uno o dos días y los más pequeños no tienen concurso de arco. Pero en contrapartida el ambiente es más cercano y real.

Hace un año, en medio de las Ger, cerca del lugar secreto y sagrado en dónde se encuentra enterrado Genghis Khan, custodiado por guerreros y chamanes, tuvo el Gran Maestre de la Orden Bonaria la oportunidad de vivír su primer Naadam. Danzas budistas, ceremonias, música, caballos, jeeps, juegos de feria, comida, y fiesta, mucha fiesta, en un paraje natural irrepetible, en al fondo las montañas sagradas, tuvo la oportunidad de convivir con chamanes, y conversar con ellos.


Participaban deportistas de nueve lugares diferentes del aimag, sesenta y cuatro luchadores, doce arqueros entre los que había cuatro mujeres, y cientos de caballos y jinetes. Lugar de celebración: en plena estepa, a un lado de la carretera el pueblo y al otro el estadio. El estadio de dimensiones similares a uno de fútbol regional en España, está rodeado de una muralla de unos dos metros de altura, que permite la visión del interior desde la grupa de un caballo. Aunque el comienzo del evento estaba anunciado para las once de la mañana, nada empieza hasta la una del mediodía. Ceremonia de apertura con grupos de danza, cantos y pequeñas actuaciones como en cualquier evento que se precie.


Los jinetes que participaran en las carreras del día cruzan el estadio de lado a lado, saludando a las autoridades a su paso, y dirigiéndose ya, colina arriba desde donde se iniciaran y acabaran las carreras. Uno a uno van entrando todos los luchadores en el estadio realizando la danza del águila, y presentado sus respetos a autoridades y publico. Mas adelante se enfrentaran por parejas, eliminándose uno por combate, hasta la pareja final. Mientras tanto, en una explanada a doscientos metros del estadio se esta celebrando el concurso de arco, y aproximadamente cada dos horas se inicia una carrera de caballos.

En la práctica estas todo el día yendo de arriba para abajo, a caballo, en jeep o andando, de una competición a otra. Estas en el estadio viendo la lucha, en diez minutos empezara la carrera de caballos, así que todos dejan el estadio y se van colina arriba para presenciar la salida, a los dos minutos jinetes y caballos ya se han perdido en el horizonte y ya no queda nada que ver. Así que o te quedas por allí disfrutando del paisaje y las amistades, o bajas otra vez al estadio, o bajas a ver el concurso de arco. Siempre teniendo en cuenta que en una hora poco más o menos habrá que volver a subir a ver la llegada. Así que si asistes a todas las carreras habrás hecho ocho kilómetros campo a través, la mitad de ellos en pendiente, súmale los hechos paseando por el recinto, y salen demasiados para un occidental.

Comer y beber es otro deporte durante el Naadam. Hay puestos de todo tipo esparcidos por el lugar, te y airag (leche fermentada de yegua), khuurshuur (tortitas de carne), helados, pan y frutas.

Todo transcurre muy lentamente, a las ocho cuando nos vamos, tras siete horas, aun no ha acabado el campeonato de lucha... Resumiendo, no te lo puedes perder.


El Príncipe con nómadas en al Estepa, en el viaje realizado en 2009


Carreras de caballos. Es la prueba que causa mayor respeto y admiración entre los mongoles. Son carreras pensadas para valorar al caballo y no al jinete, si se cae el jinete y el caballo cruza primero la línea de meta, es el ganador. Además los jinetes no superan los 10 años, esto garantiza que se valoren las cualidades del caballo y no las del jinete. Hay seis categorías, dependiendo de la edad del caballo, y recorren una distancia de entre 16 y 30 kilómetros. La carrera se celebra a campo abierto y es guiada por un jeep que precede a los competidores.

Arco. Los participantes visten trajes tradicionales y usan arcos construidos con una combinación de maderas, cortezas y huesos. Las flechas, hechas de ramas de sauce y plumas de buitre, se lanzan contra unos blancos de cuero redondos situados en el suelo, a una distancia de 75 mts para los hombres y 60 mts para las mujeres. Los jueces, situados junto a los blancos, certifican cada diana dando un grito y levantando la mano.

Lucha. Combinación de lucha greco-romana y sumo, no hay divisiones por peso y no hay límite de tiempo. Pierde el primero en tocar el suelo, exceptuando manos y pies. Los ganadores tiene diferentes categorías: Halcón el que gana cinco rondas, Elefante el que gana siete rondas y León el campeón absoluto del torneo. Los luchadores honran a los jueces y al público con la danza del águila antes de iniciar la ronda de combates, y el ganador también la realiza al acabar cada combate. Los luchadores visten camiseta ajustada que deja ver el torso (zodog), calzoncillos cortos ajustados (shuudag) y las pesadas botas mongolas (gutuls).

Los mongoles son el pueblo que representa a la perfección el arquetipo de los guerreros nómadas: luchaban sobre sus caballos sobre los que parecían haber nacido, y eran incansables, astutos y muy eficaces, mantienen sus tradiciones, y han querido honrar al Príncipe de Septimio-Bathzabbay el Tadmur, entregándole la prestigiosa medalla, de la Orden Sagrada y Filosófica de los Caballero de Genghis Khan.

No existió ningún otro ejército en la toda la Edad Media que combatiera bajo tan diversas condiciones climatológicas, en lugares tan diferentes y contra adversarios tan dispares como los rusos, los persas, polacos, los teutones o los chinos.

Una de sus armas más representativas es el arco. De hecho, tanto su fabricación como la práctica de la Arquería han sobrevido hasta nuestros días.

El tiro con arco está considerado deporte nacional. Forma parte del evento del año más importante para los mongoles: el Festival Naadam que se celebra entre los días 11 y 13 de julio y se trata de una competición deportiva cuyos orígenes se remontan a la época de Genghis Khan, cuando se usaba para evaluar la destreza de los soldados. Las otras dos competiciones que completan la fiesta, además del tiro con arco, son la lucha y las carreras de caballo.

Los arcos mongoles se fabricaban originariamente utilizando maderas, cuerno de animal y tendones. Como pegamento se usaba la vejiga natatoria de un pez específico, que debía ser hervida durante horas para que consiguiera la mayor consistencia adhesiva.

El uso de estos materiales y su disposición no es caprichosa: el cuerno le otorgaba potencia y el tendón elasticidad.

Pero más curioso que el arco mongol es el arco huno, también conocido como arco asimétrico.

Los guerreros hunos eran temidos por la efectividad que mostraban con su arma, puesto que disparaban al galope y erguidos, utilizando los estribos como punto de apoyo.

El arco huno presenta una particularidad que lo hace único: la posición de disparo de la flecha no se ubica en el centro del arco debido a que sus extremos son de largo diferente, para facilitar el disparo desde sus cabalgaduras.








En el Ger del Príncipe Davanyam, señor de las Tribus Mongolas