El 19 de agosto, el clero y los fieles de la IOUA-C prepararon la solicitación para Vitor Fedorovych Yanukovych, Presidente de Ucrania, en que aclararon los flagrantes hechos de las acciones anticonstitucionales de los empleados de la policía, los órganos judiciales, funcionarios públicos de cargos diferentes, que están incorporados en la planificada para la exterminación de la IOUA-C, y que fue organizada por Filaret (M.A. Denysenko), el seudopatriarca de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana del Patriarcado de Kyiv.
Hoy día, la sociedad ucraniana está atravesada por metástasis de corrupción, que ha penetrado en todos los órganos del poder estatal, legal y de Iglesia. De esto se han convencido por propia experiencia los fieles de la IOUA-C, que casi durante un año tratan de defender su honor y dignidad y salvaguardar el derecho legítimo de la libertad de conciencia y de creencias garantizados por la Constitución de Ucrania.
Por eso el 19 de agosto en la calle Bankova, hicieron llegar al Presidente de Ucrania, como custodio y garante de sus derechos y libertades constitucionales declarados en el Artículo 35 de la Constitución de Ucrania, en las normas internacionales sobre la libertad de conciencia y derechos humanos, con la demanda insistente de parar le exterminación total y la discriminación de la Iglesia de Dios en Ucrania y castigar a los culpables de crímenes inadmisibles en la Ucrania democrática.
Hoy día, la sociedad ucraniana está atravesada por metástasis de corrupción, que ha penetrado en todos los órganos del poder estatal, legal y de Iglesia. De esto se han convencido por propia experiencia los fieles de la IOUA-C, que casi durante un año tratan de defender su honor y dignidad y salvaguardar el derecho legítimo de la libertad de conciencia y de creencias garantizados por la Constitución de Ucrania.
Por eso el 19 de agosto en la calle Bankova, hicieron llegar al Presidente de Ucrania, como custodio y garante de sus derechos y libertades constitucionales declarados en el Artículo 35 de la Constitución de Ucrania, en las normas internacionales sobre la libertad de conciencia y derechos humanos, con la demanda insistente de parar le exterminación total y la discriminación de la Iglesia de Dios en Ucrania y castigar a los culpables de crímenes inadmisibles en la Ucrania democrática.