Sunday, July 26, 2009

Firma de Hermanamiento.-

Sala de Firmas de la Embajada Cultural.



Máscara entregada en nombre de la Academia Diplomática Africana, a la Academia Bonifaciana en nombre de Su Alteza Real el Príncipe Dah Bokpe de Allada.


Firma del protocolo.







Discurso de saludo del Presidente de la Academia Bonifaciana, Comendador Doctor Sante De Angelis, en la Ceremonia de hermanamiento con la Orden Bonaria, la Academia Concordia y la Academia Diplomática Africana.

Alteza, Autoridades Presentes, ilustres Académicos, y querídisimos amigos:
He aceptado el insigne honor en nombre de la Academia Bonifaciana a hermanarse con las prestigiosas Instituciones como la Orden Bonaria, la Academia de las Artes y de las Letras, ambas presididas por el Príncipe José Emmanouél Mosquera y Castelo de Septimio-Bathzabbay El Tadmur, como Gran Maestre y Rector Magnífico Hereditario, así como la Academia Diplomática Africana, representada por el Príncipe Dah Bokpe de Allada.
Un deferente y obsequioso saludo para Su Eminencia Monseñor Alfredo Montreza, Arzobispo Metropolita Titular de Eurasia de la Hermana Iglesia Ortodoxa Sirio-Bizantina, así como al Excmo. D. José Enrique de Tomás. Debo agradecer de modo particular en esta Sede al Cónsul Honorario de Mongolia Aldo Colleoni, que ha sido el promotor de esta iniciativa que espero sea fructífera y de paso a importantes sucesos.
Para la Academia que presido, este año ha estado particularmente rico de grandes eventos culturales y sociales, recuerdo entre otros el I Sínodo Ecuestre de la Paz, realizado en Agnani, que dio paso al Solemne evento de Hermanamiento entre la Academia Bonifaciana, y la Orden Dinástica Teutónica de Swebia.
En este período de hermanamiento de ideales y cultura, han sucedido muchos importantes eventos, entre ellos el nombramiento de Embajador Plenipotenciario de la Orden, precedida el 2 de Mayo de Gran Comendador de Justicia, el hermanamiento del 16 de Mayo en Asís, con la Confederación Internacional de Caballeros Cruzados, la solemne ceremonia a Scurcola Marsiciana (Aquila), para recordar el 731 aniversario de la creación del Santuario de María Santísima de la Victoria con Su Eminencia el Cardenal señor Paul Poupard, Presidente Emérito del Consejo Pontificio de la Cultura y el diálogo Interreligioso, acompañado de la Autoridades religiosas, militares y políticas de Aquila, y de una fuerte delegación del pueblo, y un cortejo histórico que ha creado admirablemente el Fausto de la Batalla de Tagliacozzo.
Propio de esto, la Academia Bonifaciana, tras otros méritos ha promovido la paz, como exponente de dos importantes Casas en la historia de la Humanidad, que el destino, ha vuelto enemigos en el Campo de Batalla, este importante acto fue firmado en el Castillo de San Celestino V en Fumone, y ha sido fruto de mi modesto labor diplomático en la doble vestidura de Embajador de la Orden, y Presidente de la Academia Bonifaciana, que como bien sabern, como último fin la promoción de la Cultura de la Paz, y la Cultura de la Hermandad cristiana de todos los hombres.
Debo decirle Alteza, que por mi trabajo he recibido algunos títulos ecuestres y académicos, entre otros en la fiesta de la República Italiana del 2.008, el Jefe del Estado, Sen. Giorgio Napolitano, y el Jefe del Gobierno Honorable Silvio Berlusconi, me han conferido la ambiciosa distinción honorífica de Caballero de la Orden al Mérito de la República Italiana, título entregado por trabajar por el bien común, no sólo en el ámbito Académico y Cultural, sino social y humanitario.
La Institución Bonifaciana ONLUS, que desde el 2.003 opera en dos sectores; cultura y espiritualidad, nacida para defender y valorizar las enseñanzas del Papa Bonifacio VIII, no persigue fines de lucro y promueve la conservación, la valorización de la recuperación de bienes religiosos, culturales, arquitectónicos, artísticos, históricos, instituyendo anualmente el PREMIO INTERNACIONAL BONIFACIO VIII – AGNANI, que se concede a personajes de relevancia nacional e internacional, que han sido distinguidos en sus campos respectivos por su profesionalidad, empeño y promoción de la dignidad humana.
Debo recordar, la numerosa actividad social, adopciones y escolaridad, y enseñanza para laicos, y la vida: la familia, la salud, la situación internacional, la solidaridad, el deporte, etc.
Esta actividad beneficio la imagen de Italia en el Mundo.
Debo recordar, el envío de medicamentos para el pueblo libanés, y mi visita oficial al Comando Unifil de la ONU, en Líbano en los meses de noviembre y diciembre del 2.007, y mi encuentro con el General en Jefe, Oficiales, y soldados de las fuerzas internacionales presente y en particular con nuestros Operadores por la Paz, italianos y españoles.
Una experiencia que me ha hecho sentirme muy orgulloso por ser cristiano y un ciudadano europeo y del Mundo, de estar con los jóvenes serenos, fiel testimonio del valor de la Solidaridad.
He visto hombres y mujeres, que siguiendo el mandato de sus instituciones, buscan ayudar a un pueblo desafortunado que va avanzando hacia unos valores democráticos capaces de promover el crecimiento socio-económico.
Gentiles señores, y señoras, agradezco encontrarme en Madrid, corazón de España, siempre amiga de Italia, firmando esta Hermandad, entre nuestras personas y la Academia Bonifaciana en un Constante empeño, de renovación moral y espiritual de la sociedad Europea, del que todos somos parte.