Tuesday, October 20, 2009

La Serenísima.-

El día 16 llegamos a Venecia. En estos días de permanencia en la serenísima íbamos a reunirnos con grupos masónicos de gran relevancia, que querían pertenecer al movimiento interreligioso, que abandera la Orden Bonaria, y que daremos a conocer en las crónicas de este apasionante viaje.

Hospedados en una Casa Señorial, de nuestros anfitriones los Príncipes Vernieri, descendientes de alguna de las familias más poderosas, y con algunos Dogos en su haber. Empezamos a conocer la Venecia de otra realidad, como puerta inter-dimensional hacia lo desconocido.
Así como no hay una sola realidad, no existe una sola Venecia. Hemos tenido la suerte de poder ver, o más bien entrever, varias de esas realidades que, sin importar el tiempo, se superponen unas encima de otras. Existe una Venecia plagada de turistas, rodeada de lugares monumentales y espléndidos que nos hablan de tiempos mejores. La de la plaza San Marcos, del palacio Ducal y el Gran Canal que, a pesar de todo solo muestran los restos de lo que antaño fue la serenísima me pareció el clima perfecto.

Venecia controló el tráfico de mercancías entre Oriente y Occidente y fue grande por sus innovaciones navieras. Sin embargo a partir del inicio del siglo XV y, sobretodo, a partir del descubrimiento de América, la importancia de las rutas controladas por Venecia comenzaron a decaer. Pocos años después, a mediados del cinquecento se produjeron los dos grandes incendios que destruyeron gran parte de la ciudad, lo cual me resulta tremendamente poético.
Existe otra ciudad que solo es visible de noche, a la luz de la luna llena y con las calles vacías. Ni turistas, ni venecianos –aunque son pocos- frecuentan las calles y fundamentas (calles de los canales, que no fondas) después de medianoche, los primeros por estar exhaustos, quizá los segundos por las innumerables leyendas sobre fantasmas que moran sus calles de noche buscando paz (el dux ciego, el usurero, la muchacha sin cabeza).

Otra Venecia de símbolos ocultos y arcanos se esconde en cada esquina, desde las pateras, pequeños escudos situados encima de los portales, a los grabados repartidos por toda la ciudad: pequeñas vírgenes montadas sobre cañones o tallados de de botas, dromedarios o dragones, algunos de los cuales se conoce el significado, otros son guardados por órdenes iniciáticas y secretas….
El Príncipe de Septimio-Bathzabbay El Tadmur.-

EL GRAN CANAL.-

MISTERIOSOS RINCONES, ANÓNIMOS A LA VISITA DE LOS TURISTAS.-

EN LA PLAZA DE SAN MARCOS.-

EL LEÓN DE SAN MARCOS, EN TIEMPOS DE PAZ EL LIBRO ABIERTO, EN TIEMPOS DE GUERRA EL LIBRO CERRADO.-

LA FABRICA DE MURANO, PUSO A DISPOSICIÓN D ELOS PRÍNCIPES UN BARCO PRIVADO MIENTRAS DURÓ SU ESTANCIA EN TIERRAS VENECIANAS.-

LA CASA DE CAMPO, EN LIDO DE LA PODEROSA FAMILIA VERNIERI.